Época:
Inicio: Año 1 A. C.
Fin: Año 1 D.C.

Antecedente:
CANTOS Y CRÓNICAS DEL MEXICO ANTIGUO



Comentario

ESTOY TRISTE
Estoy triste, me aflijo,

yo, el señor Nezahualcóyotl.

Con flores y con cantos

recuerdo a los príncipes,

a los que se fueron,

a Tezozomoctzin, a Quahquauhtzin.

En verdad viven,

allá en donde de algún modo se existe.

¡Ojalá pudiera yo seguir a los príncipes,

llevarles nuestras flores!

¡Si pudiera yo hacer míos

los hermosos cantos de Tezozomoctzin!

Jamás perecerá tu nombre,

¡oh mi señor, tú, Tezozomoctzin!

así, echando de menos tus cantos,

me he venido a afligir,

sólo he venido a quedar triste,

yo a mí mismo me desgarro.

He venido a estar triste, me aflijo.

Ya no estás aquí, ya no,

en la región donde de algún modo se existe,

nos dejaste sin provisión en la tierra,

por esto, a mí mismo me desgarro.



YO LO PREGUNTO

Yo, Nezahualcóyotl, lo pregunto:

¿Acaso de veras se vive con raíz en la tierra?

No para siempre en la tierra:

sólo un poco aquí.

Aunque sea de jade se quiebra,

aunque sea oro se rompe,

aunque sea plumaje de quetzal se desgarra.

No para siempre en la tierra:

sólo un poco aquí.



PERCIBO LO SECRETO...

Percibo lo secreto, lo oculto:

¡Oh vosotros señores!

Así somos, somos mortales,

de cuatro en cuatro nosotros los hombres,

todos habremos de irnos,

todos habremos de morir en la tierra...

Nadie en jade,

nadie en oro se convertirá:

en la tierra quedará guardado.

Todos nos iremos

allá, de igual modo.

Nadie quedará,

conjuntamente habrá que perecer,

nosotros iremos así a su casa.

Como una pintura

nos iremos borrando.

Como una flor,

nos iremos secando

aquí sobre la tierra.

Como vestidura de plumaje de ave zacuán,

de la preciosa ave de cuello de hule,

nos iremos acabando

nos vamos a su casa.

Se acercó aquí

hace giros la tristeza

de los que en su interior viven...

Meditadlo, señores,

águilas y tigres,

aunque fuerais de jade,

aunque fuerais de oro

también allá iréis,

al lugar de los descarnados...

Tendremos que desaparecer

nadie habrá de quedar.



ESTOY EMBRIAGADO...

Estoy embriagado, lloro me aflijo,

pienso, digo,

en mi interior lo encuentro:

si yo nunca muriera,

si nunca desapareciera.

Allá donde no hay muerte,

allá donde ella es conquistada,

que allá vaya yo...

Si yo nunca muriera,

si yo nunca desapareciera.



¿A DÓNDE IREMOS?

¿A dónde iremos

donde la muerte no existe?

Mas, ¿por esto viviré llorando?

Que tu corazón se enderece:

Aquí nadie vivirá para siempre.

Aun los príncipes a morir vinieron,

los bultos funerarios se queman.

Que tu corazón se enderece:

aquí nadie vivirá para siempre.



LO COMPRENDE MI CORAZÓN

Por fin lo comprende mi corazón:

escucho un canto,

contemplo una flor:

¡Ojalá no se marchiten!



NO ACABARÁN MIS FLORES...

No acabarán mis flores.

No cesarán mis cantos.

Yo cantor los elevo,

se reparten, se esparcen.

Aun cuando las flores

se marchitan y amarillecen,

serán llevadas allá,

al interior de la casa

del ave de plumas de oro.



CON FLORES ESCRIBES...

Con flores escribes, Dador de la vida,

con cantos das color,

con cantos sombreas

a los que han de vivir en la tierra.

Después destruirás a águilas y tigres,

sólo en tu libro de pinturas vivimos,

aquí sobre la tierra.

Con tinta negra borrarás

lo que fue la hermandad,

la comunidad, la nobleza.

Tú sombreas a los que han de vivir en la tierra.



EN EL INTERIOR DEL CIELO...

Sólo allá en el interior del cielo

tú inventas tu palabra,

¡Dador de la vida!

¿Qué determinarás?

¿Tendrás fastidio aquí?

¿Ocultarás tu fama y tu gloria en la tierra?

¿Qué determinarás?

Nadie puede ser amigo

del Dador de la vida...

Amigos, águilas, tigres,

¿a dónde en verdad iremos?

Mal hacemos las cosas, oh amigo.

Por ello no así te aflijas,

eso nos enferma, nos causa la muerte.

Esforzaos, todos tendremos que ir

a la región del misterio.



¿ERES TÚ VERDADERO...?

¿Eres tú verdadero (tienes raíz)?

Sólo quien todas las cosas domina,

el Dador de la vida.

¿Es esto verdad?

¿Acaso no lo es, como dicen?

¡Que nuestros corazones

no tengan tormento!

Todo lo que es verdadero,

(lo que tiene raíz),

dicen que no es verdadero

(que no tiene raíz).

El Dador de la vida

sólo se muestra arbitrario.

¡Que nuestros corazones

no tengan tormento!



NO EN PARTE ALGUNA...

No en parte alguna puede estar la casa del inventor de sí mismo.

Dios, el señor nuestro, por todas partes es invocado,

por todas partes es también venerado.

Se busca su gloria, su fama en la tierra.

Él es quien inventa las cosas,

él es quien se inventa a sí mismo: Dios.

Por todas partes es invocado,

por todas partes es también venerado.

Se busca su gloria, su fama en la tierra.

Nadie puede aquí,

nadie puede ser amigo

del Dador de la vida:

sólo es invocado,

a su lado,

junto a él,

se puede vivir en la tierra.

El que lo encuentra,

tan sólo sabe bien esto: él es invocado,

a su lado, junto a él,

se puede vivir en la tierra.

Nadie en verdad

es tu amigo,

¡oh Dador de la vida!

Sólo como si entre las flores

buscáramos a alguien,

así te buscamos,

nosotros que vivimos en la tierra,

mientras estamos a tu lado.

Se hastiará tu corazón.

Sólo por poco tiempo

estaremos junto a ti y a tu lado.

Nos enloquece el Dador de la vida,

nos embriaga aquí.

Nadie puede estar acaso a su lado,

tener éxito, reinar en la tierra.

Sólo tú alteras las cosas,

como lo sabe nuestro corazón:

nadie puede estar acaso a su lado,

tener éxito, reinar en la tierra.